Segundo Capitulo: CLASES

La noche me la había pasado llorando, recordando a mi madre. Debía superar su muerte, pero era difícil, talvés demasiado. Quería gritar, que me devolvieran a mi madre, eramos muy unidas, a parte de ser mi madre, era como mi mejor amiga, mi confidente. 

Me bañe muy despacio en la tina de agua caliente, y me hice un tratamiento para las ojeras que mi madre me había enseñado. Me arregle con mi típica ropa negra, y labial rojo, me maquille fuerte como me gustaba y me dirigí a la primera planta

- Buenos días Morris- le dije a mi padre

- Buenos días Beth- me contesto- toma tu desayuno, nos vemos después tengo que ir a trabajar

- Esta bien- me beso en la frente, le sonreí un poco y me senté a comer, cuando terminé lave mi plato y me fui a cepillar, cogí mi maleta me retoque el labial rojo y me dirigí a la escuela.

Me subí en el auto que mi abuelo me había regalado (ya sabía manejar) la escuela quedaba cerca, no era un lugar muy grande. 

(...)

Me dirigí al salón de horarios, para que me lo entregaran junto con el comprobante de asistencia, me dirigí al salón, español, una de mis materias favoritas, yo era estudiosa y poco sociable por lo que era muy aplicada. Ya todos estaban organizados, ese saco de hormonas enorme pensando en trivialidades sin sentido. Me senté en un grupo con tres chicas y dos chicos. 

- Hola mi nombre es Lola Freed- me saludo lo chica extendiéndome la mano 

- Elizabeth, Elizabeth Darren- dije estrechando su mano

- Mi nombre es Dany Solibam - dijo el chico apuesto que abrazaba a Lola 

- El mío es Miranda Kabroom

- El mío Tamira Saenz

- Y el mío Chace Foks- dijo el chico de perfectos ojos azules. Otro saco de hormonas. 

- Ahhh. Vale. 

- Bueno chicos quien me puede decir que es la narración, la nueva- pretendía hacerme quedar mal ¡ha!

- La narración, se le denomina al resultado de la acción de narrar , lingüística y visualmente hechos que se producen a lo largo de un 

tiempo determinado, y que, normalmente da como resultado la


variación o transformación de la situación inicial Todos se quedaron


mirándome con cara de bobos y el profesor se decepciono quería 


que me hubiese equivocado.Las clases pasaron así, como nueva 


siempre me tocaba responder y siempre respondía bien.Cuando 


salimos en un tiempo de descanso. Me fui al carro a escuchar un 


poco de música, no tenía hambre, no quería compartir con nadie, 


quería quedarme sola. Siempre quería eso. Me metí al auto y me


puse los audífonos, me quede totalmente dormida unos golpes en el 


vidrio de mi puerta, me levantaron, el chico ese tal Chace me


levanto


- ¿Qué?


- A clases


- Ya vale, ya voy.


Me baje del auto el chico me miro profundamente y me beso en los 


labios sin previo aviso...
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Gracias por comentar en la entrada pasada, espero comenten en este 


abrazos de:


Sofia Cullen

Primer Capitulo: Mudanza

¡No! ¡No! ¡Por favor díganme que no es cierto! ¡Mi madre no! 


- ¡NO!- grite. 


Otra vez el mismo mal sueño, esto era imposible e increíble, esto tenía que parar, mi padre no había tenido la mejor solución pero quedarnos en esa casa sería un problema eterno en mi vida, debíamos dejar la asombrosa ciudad mundial. Nueva York. Aunque yo no quisiese, aunque dejar a mis amigos fuera lo peor que viviera, realmente era lo que debía hacer, irme lejos olvidando todo lo malo y solo recordando lo bueno, llevándome los recuerdos preciosos que había compartido con mi madre hace un año. Tras su muerte mi vida había tomado un giro inesperado...ahora era el momento perfecto para dejar todo, y solo irme con mi padre


- Te extrañaremos Beth- me decían Beth de cariño
- Y yo a ustedes chicos, pero ahora prométanme que siempre hablaremos por messenger, ¿me lo prometen?
- Claro que si, mantente en contacto con nosotros- me decía John
- Lo haré- abracé a cada uno para siempre tener ese pequeño pero armonioso saco de amistad que jamás dejaría huir. Jamás.


- Ya chicos, debemos irnos- decía mi padre sacando la última caja de mudanza
- Bueno un hasta luego chicos- les dije
- Un hasta luego amiga- me dijeron
(...)


Una hora. Eso faltaba para llegar a Michigan ese pequeño estado, en el que reiniciaría mi vida.


Suspiré al ver el letrero de Bienvenidos.
- Tranquila pequeña, estaremos bien- le decía su padre. Ellos se entendían perfectamente, pues sufrían por lo mismo
- Lo se padre, no te preocupes entonces... ¿listo para iniciar una buena y nueva vida?- asintió 
- Revisa que nada se haya dañado querida- me dijo durante el viaje
(...)




Llegamos a la nueva casa, me baje del auto, con un aire de misterio. Después de la muerte de mi madre, me había vuelto realmente extraña, pero así ahogaba todo ese sentimiento de odio hacia la muerte y el destino. 
- Bienvenida- dijo mi padre- tu nueva casa preciosa
- Gracias Morris- le dije, al parecer él entendía lo difícil que se me hacia volver a llamarle padre, a veces él también me decía hola señorita Darren 
- ¿Mami porqué esa chica utiliza todo ese disfraz?- preguntaba una niña
- ¡No la mires, es una satánica! - lo que me faltaba, una satánica por utilizar piercing y labial negro, pero diciendo la verdad, yo me sentía muy bien. Al diablo con los que pensaran mal de mi...a decir verdad, eso sería lo mejor que todos pensaran lo peor de mi 
Entré a mi nuevo hogar, era una mansión muy linda y elegante. 
le pregunte a mi padre donde se encontraba mi habitación el me la indico...gracias al cielo mi padre tenía buen gusto y sabia lo que me gustaba...Adoraba el negro y el morado. *Solo tranquilízate y comienza tu vida* me decía a mi misma. Entonces me encamine a explorar mi casa. 
Tras un buen rato de haberme familiarizado con todo, me encamine de nuevo a mi recamara, saque todo de la mudanza, gracias a Dios, la maleta era protegida. Y ninguna loción o cualquier otra cosa de vidrio y porcelana se me había quebrado. 
- ¡Cariño..ya te inscribí una escuela...¿vas mañana?!- más vale comenzar desde ahora
- ¡Si padre, voy a ir!- grite lo más fuerte que pude
- ¡Bueno!- grito finalmente mi padre


Eran ya las 6:00pm, me fui a dar un baño de espuma, mi piel era igual de blanca que la nieve, mi padre decía que yo era un diamante hermoso y madre siempre respondía que yo era un regalo de la luna de plata, por eso mi dije de plata traía una hermosa luna de plata.


Flashblack 


- Cumpleaños feliz, te deseamos a ti, cumpleaños Marie, cumpleaños feliz ¡Bravo!- la habitación llena de aplausos, y yo cumpliendo mis tan esperados 15 años, no quería algo extravagante, quería algo normal. 
- Ven con el abuelo Elizabeth- ella fue a abrazarle- Ten estas son las llaves de tu nuevo auto, pero prométeme que lo utilizaras cuando cumplan dieciséis- yo muy emocionada asentí
- Gracias abuelo, no tenías porque molestarte- le había dicho yo
- Claro que no son molestias pequeña.
- Gracias papá- decía mi madre, él la miro con ternura y luego de nuevo a mi
- Bueno, bueno, sin tanto sentimentalismo ahora vamos con Jonny- decía mi padre, y así todos me entregaron sus regalos unos muy llamativos y otros lindos y normales.
Todos se habían ido, mi madre me había dicho que fuera a mi cuarto
Subí las escaleras despacio y llegue a mi cuarto, justo en la cama al pie de la mesita de noche estaba el dije plateado con la hermosa luna de diamante.
La cogí
- Se que no es mucho, pero también se que amas las cosas pequeñas y con un significado grande- la volteé a mirar
- Es hermoso madre gracias- le decía yo
- De nada Marie- era la única que me decía así 
Me lo ponía, y luego me abrazaba con fuerza...
- Esto es para que jamás olvides que tu madre siempre estará contigo...


Flashblack - Fin


Agarrando mi dije aun, no pude contener más las lágrimas.
Mi padre me vio
- No cariño, no llores, todo estará bien, lo prometo
- Gracias padre
- Lo prometo...- y me ahogaba en un mar de lágrimas con mi padre consolándome...
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Espero comenten mucho, pues este nuevo blog se alimenta de aquellos comentarios constructivos que deseo recibir... un beso


Sofia Cullen.